La narración en tercera persona es una forma de contar una historia desde una perspectiva externa, sin usar la primera o segunda persona. Esta narrativa se caracteriza por referirse al narrador como “él”, “ella” o “ellos” y al protagonista de la historia como “él”, “ella” o “ellos”. Esta forma de contar una historia se usa ampliamente en la literatura, el cine, la televisión, los videojuegos y otros medios de comunicación. En este artículo, vamos a echar un vistazo a algunos ejemplos cortos de narración en tercera persona.
Ejemplo 1: El viaje de Eliza
Eliza emprendió un largo viaje en busca de aventuras y descubrimientos. Ella se aventuró por bosques antiguos, cruzó ríos turbulentos y escaló montañas imponentes. Durante su viaje, Eliza conoció a personas interesantes, aprendió cosas nuevas y se enfrentó a muchos desafíos. Finalmente, Eliza volvió a casa con una perspectiva diferente sobre el mundo y una mejor comprensión de sí misma.
Ejemplo 2: La vida de Marc
Marc era un hombre bondadoso y amable. Se dedicaba a ayudar a los demás y a cuidar su familia. Él trabajaba duro para ganarse la vida y siempre estaba dispuesto a ayudar a los necesitados. Marc era una persona cariñosa y compasiva, cuyo corazón era abierto a todos. Era una bendición para los que lo rodeaban, y su desaparición dejó un gran vacío en la vida de muchos.
La narración en tercera persona es una forma de contar una historia que se usa ampliamente en la literatura, el cine, la televisión, los videojuegos y otros medios de comunicación. Esta narrativa se caracteriza por referirse al narrador como “él”, “ella” o “ellos” y al protagonista de la historia como “él”, “ella” o “ellos”. Usar esta narrativa puede ayudar al autor a contar una historia desde una perspectiva externa, lo que permite al lector tener una mejor comprensión de la trama y de los personajes. A partir de los ejemplos anteriores, esperamos que hayas entendido mejor cómo funciona la narración en tercera persona.
Torsa Bibito
Raok Naman