La mediación es una forma de resolver conflictos en la que un tercero neutral ayuda a las partes a llegar a un acuerdo mutuamente satisfactorio. La mediación es un proceso de comunicación entre las partes, donde los mediadores proporcionan un contexto para que las partes se comuniquen entre sí. Las preguntas circulares son una herramienta útil para los mediadores ya que ayudan a ambas partes a pensar profundamente sobre su situación y a descubrir la verdadera naturaleza del conflicto. Aquí hay algunos ejemplos de preguntas circulares en mediación.
¿Cuáles son sus objetivos?
La pregunta “¿Cuáles son sus objetivos?” Ayuda a las partes a reflexionar sobre lo que quieren lograr con la mediación. Esta pregunta ayuda a ambas partes a visualizar la situación de una manera diferente y les ayuda a entender mejor sus propias necesidades y deseos. Esta pregunta les permite a las partes abordar el conflicto desde una perspectiva distinta y llegar a un acuerdo satisfactorio.
¿Qué está en juego?
La pregunta “¿Qué está en juego?” Ayuda a las partes a comprender lo que está en juego en la situación. Esta pregunta les ayuda a comprender mejor los intereses de sus contrapartes y a tener una mejor comprensión de la situación en su conjunto. Esta pregunta también ayuda a las partes a entender cómo sus intereses están relacionados y cómo pueden beneficiarse mutuamente de un acuerdo.
¿Qué ha fallado?
La pregunta “¿Qué ha fallado?” Ayuda a las partes a identificar los problemas subyacentes que han llevado a la situación. Esta pregunta les ayuda a identificar los factores que contribuyeron al conflicto y a analizar qué podría haber hecho para evitarlo. Esta pregunta también les ayuda a comprender mejor los intereses de sus contrapartes y a desarrollar una solución que sea satisfactoria para ambas partes.
¿Qué es lo que realmente importa?
La pregunta “¿Qué es lo que realmente importa?” Ayuda a las partes a reflexionar sobre lo que es realmente importante en la situación. Esta pregunta les ayuda a identificar los intereses de ambas partes y a identificar qué elementos son clave para llegar a un acuerdo satisfactorio. Esta pregunta también les ayuda a comprender mejor la situación en su conjunto y a desarrollar una solución que sea satisfactoria para ambas partes.
¿Qué pasaría si…?
La pregunta “¿Qué pasaría si…” ayuda a las partes a explorar los posibles resultados de una solución. Esta pregunta les ayuda a comprender cómo se verían las cosas desde la perspectiva de la otra parte y les da una mejor comprensión de los intereses de sus contrapartes. Esta pregunta también les ayuda a imaginar soluciones creativas que sean satisfactorias para ambas partes.
¿Qué podemos hacer diferente?
La pregunta “¿Qué podemos hacer diferente?” Ayuda a las partes a explorar las posibles soluciones al conflicto. Esta pregunta les ayuda a pensar fuera de la caja y les permite explorar soluciones creativas que sean satisfactorias para ambas partes. Esta pregunta también les ayuda a comprender mejor los intereses de sus contrapartes y a desarrollar una solución que sea satisfactoria para ambas partes.
Las preguntas circulares son una herramienta útil para los mediadores que buscan ayudar a las partes a llegar a un acuerdo satisfactorio. Estas preguntas ayudan a las partes a reflexionar sobre su situación y a descubrir la verdadera naturaleza del conflicto. Estas preguntas también les ayudan a comprender mejor los intereses de sus contrapartes y a desarrollar soluciones creativas que sean satisfactorias para ambas partes. Si bien hay muchas preguntas circulares que se pueden hacer en una mediación, estos ejemplos proporcionan una buena base para empezar.