Un curso en línea es una manera cómoda, efectiva y económica de aprender un tema en particular. Al igual que los cursos presenciales, los cursos en línea requieren un diseño instruccional bien planeado para asegurar el éxito del estudiante. A continuación se presentan dos ejemplos de diseño instruccional para un curso en línea.
Ejemplo 1: Curso de marketing digital
Un curso de marketing digital debe tener un diseño instruccional bien organizado para ayudar a los estudiantes a entender los diferentes conceptos de marketing digital y cómo pueden utilizarlos para promover un negocio. El diseño instruccional del curso de marketing digital debe incluir los siguientes elementos:
- Un objetivo general para el curso.
- Una lista de los conceptos clave que se cubrirán en el curso.
- Una lista de actividades para ayudar a los estudiantes a aprender los conceptos.
- Una lista de recursos para ayudar a los estudiantes a profundizar en los conceptos.
- Una lista de evaluaciones para verificar el progreso de los estudiantes.
Los objetivos del curso deben ser claramente definidos para que los estudiantes sepan lo que se espera de ellos. Los conceptos clave deben estar bien organizados para que los estudiantes puedan entenderlos fácilmente. Las actividades deben ser interesantes y relevantes para ayudar a los estudiantes a interiorizar los conceptos. Los recursos deben ser de buena calidad y de fácil acceso para los estudiantes. Las evaluaciones deben ser justas y deben medir el progreso de los estudiantes.
Ejemplo 2: Curso de contabilidad
Un curso de contabilidad debe tener un diseño instruccional bien organizado para ayudar a los estudiantes a entender los diferentes conceptos de contabilidad y cómo pueden utilizarlos para administrar un negocio. El diseño instruccional del curso de contabilidad debe incluir los siguientes elementos:
- Un objetivo general para el curso.
- Una lista de los conceptos clave que se cubrirán en el curso.
- Una lista de actividades para ayudar a los estudiantes a aprender los conceptos.
- Una lista de recursos para ayudar a los estudiantes a profundizar en los conceptos.
- Una lista de evaluaciones para verificar el progreso de los estudiantes.
Los objetivos del curso deben ser claramente definidos para que los estudiantes sepan lo que se espera de ellos. Los conceptos clave deben estar bien organizados para que los estudiantes puedan entenderlos fácilmente. Las actividades deben ser interesantes y relevantes para ayudar a los estudiantes a interiorizar los conceptos. Los recursos deben ser de buena calidad y de fácil acceso para los estudiantes. Las evaluaciones deben ser justas y deben medir el progreso de los estudiantes.
Los cursos en línea son una excelente manera de aprender y poner en práctica un tema en particular. Con un diseño instruccional bien planeado, los estudiantes pueden obtener los mejores resultados. Los dos ejemplos anteriores muestran cómo un diseño instruccional adecuado puede ayudar a los estudiantes a entender los conceptos y ponerlos en práctica para obtener los mejores resultados.
Amane Dean
Raok Naman