Ejemplo De Oda Corta Con Autor

¿Qué es una oda?

Una oda es un poema de acentuado tono laudatorio, en el que se exalta la grandeza de una persona, de una acción, de un paisaje, de una ciudad, de un sentimiento, de una obra literaria, de una institución, etc. A diferencia de la elegía, que suele expresar tristeza y melancolía, la oda es un poema lleno de entusiasmo y júbilo, que describe la belleza de los objetos y de los sentimientos de una forma lírica. Las odes suelen ser poemas extensos, pero también hay odes cortas.

Oda corta a una guitarra

Esta oda corta fue escrita por el poeta español Antonio Machado. Se trata de un poema de amor hacia una guitarra, en el que el autor nos describe el sonido que emite la guitarra cuando la toca con suavidad.

Dulce guitarra, silenciosa, tu
voz tan suave y tan pura
me llena el alma de ternura
y me hace suspirar de amor.

Tus notas tristes me conmueven
y me hablan de tiempo perdido,
de luces de otro mundo visto
en el alma de un iluso poeta.

Tu canto se hace eco en mi pecho
y se me escapa una lágrima,
pues en tu sonido me encuentro
y me siento como en mi casa.

Oda corta de Rubén Darío

Esta oda corta fue escrita por el poeta nicaragüense Rubén Darío. Se trata de un poema de amor a su país, en el que el autor nos describe la belleza y la grandeza de Nicaragua, y nos invita a amarla como él la ama.

Nicaragua, mi patria amada,
en tu suelo yo nací.
Cantemos alegres y contentos
y juntos vivamos en paz.

Tu lago de profunda belleza,
tu sol que brilla como oro,
tu cielo tan azul y tan vasto,
¡es el más bello del mundo!

En tu pueblo hay gente buena,
que con amor te defiende.
Nicaragua, mi patria hermosa,
te amo con toda mi alma.

Las odes son poemas llenos de entusiasmo y júbilo, que suelen ser muy extensos, pero también hay odes cortas. En este artículo hemos visto dos ejemplos de oda corta, una escrita por Antonio Machado, y otra por Rubén Darío. Ambas nos enseñan la belleza y la grandeza de los objetos y de los sentimientos, y nos invitan a amarlos como lo hacen los poetas. Por eso, no dejes de leer poesía, ¡te encantará!